«Toíto» te lo permito, menos que me mentes la Nocilla. Porque hay una
generación de chicos y chicas que crecimos con la EGB. Nuestras madres
quitaban el polvo con «Centella», lavaban la vajilla con un bote blanco
con
el tapón naranja de «Mistol», al «Jabón deMarsella» le llamaban
«Lagarto».
Nuestros padres conducían un «Seat 131 Supermirafiori».
Nuestras bicis eran «BH» y nuestras primeras zapatillas de deporte
fueron
unas «Paredes», aunque a nuestras madres les gustaran máslos «Kickers».
Nos cortaban el pelo «a navaja». Todos veiamos sólo TVE, aunque podíamos
elegir entre el UHF y el VHF.
Todos bebíamos gaseosa «La Casera» o «La Pitusa». Los hombres fumaban
«Ducados». Los chicles eran «Cheiw» y los caramelos «PEZ». La gente
dormía
de miedo en colchones «Pikolín» y el Athletic de Bilbao y la Real
ganaban
las Ligas por pares hasta que a Butragueño le dio por enseñar los
huevos.
A Sabrina se leescapó una teta en la Gala de Nochevieja y en todo el
pais
no se habló de otra cosa hasta el mes de marzo. A Alaska le dejaban
presentar un programa para crios en la tele y Pancho el de «Verano Azul»
todavía no se metía picos.
Una señora le contaba a «Encarna de Noche» que se le quemaba el hijo en
Móstoles porque tenía las empanadillas haciendo la mili. Una caja de 12
«Plastidecores» era un buen regalo de cumpleaños y por uno «color carne»
eras capaz de matar. Las cajas de 24 eran como Bin Laden, existían, pero
nadie las había visto. Una bolsa de pipas «Facundo» de 15 pelas era
enorme
y por una peseta te daban dos «Sugus». Repartían albumes a las salidas
de
los colegios para engancharte a la colección. Los sobres de cromos
costaban
5 pelas, pero también te los daban con las tapas de los yogures
«Yoplait».
En aquel pais de menos de 5.000 dólares de renta per cápita, nos daban
dos
«Petisuis», pero es que antes eran la mitad de tamaño. Las «María» eran
«Fontaneda», los camiones «Ebro» y las furgonetas «DKW». El camión del
butano tocaba la bocina y los críos nos hacíamos brechas en los hierros
oxidados de los columpios y nuestras madres nos daban algún cachete por
rompernos los pantalones. Nosotros llevabamos petachos en los codos de
los
jerseis.
En vez de un Magnum Almendrado, pedías un «polo de limón» y a veces, el
chocolate era «La Campana de Elgorriaga». (Malo, malo, malo). Las pilas
«Tximist» solían romperse cuando se agotaban en nuestros casettes,
«mono»
y los tebeos de «Mortadelo» pasaban de mano en mano.
Hubo muchas niñas cuya primera colonia fue «Chispas». No había cartones
de
leche en tetra brik, sino que la leche venía en bolsas de plástico que
necesitaban un recipiente para meterse en la nevera y el detergente
venía
en cubos redondos. Y en vez de grabadoras de DVD y CD-ROM, te ibas a
casa
de tu colega con radiocasette de doble pletina a llenar una cinta TDK de
90
minutos de juegos para spectrum 48k.
Con la revista TeleIndiscreta regalaban pegatinas de UVEEEEEEEEEEE!!!!
Aquella generación coleccionabamos cochecitos «Guisval», el helicóptero
de»Tulipán» aterrizaba en las piscinas para regalar bocadillos en los
anuncios de la tele. Aquella generación empleabamos el vaso de «Nocilla»
para dibujar a Naranjito.
Así que la Nocilla, ni mentarla. Además, es «leche, cacao, avellanas y
azúcar». En cambio, a saber que le echarán a la Nutella esa.